arrow_backEmergency WASH

A.2 Riesgos y factores que afectan la salud y la higiene

Hay múltiples factores que afectan la salud y el bienestar de las personas, no solo el acceso a WASH. En muchas emergencias, las personas se ven desplazadas de sus hogares y es posible que ya no tengan un sustento o acceso a refugio, atención médica o alimentos adecuados. La promoción de la salud es una tarea compleja y multifacética; requiere que todos los sectores trabajen juntos y coordinen sus esfuerzos de evaluación. Las intervenciones deben priorizarse para lograr el mayor impacto posible para la mayor cantidad de personas. Algunas intervenciones, como brindar un medio rápido de eliminar las heces o apoyar a las organizaciones y redes de la comunidad, deberían implementarse en paralelo con el proceso de evaluación cuando el riesgo para la salud es alto.

Los riesgos e influencias que afectan a la salud abarcan diferentes sectores e intervenciones. Hay una asociación particularmente importante entre la malnutrición y la incidencia y gravedad de la diarrea. La higiene de los alimentos también es fundamental para mejorar la salud pública. Las intervenciones de WASH también son importantes al responder a brotes de determinadas enfermedades infecciosas como ébola, COVID-19 o malaria. Incluso cuando las enfermedades infecciosas no son tan generalizadas, las malas condiciones de salud ambiental pueden tener un efecto perjudicial sobre la salud física y mental y el bienestar, y es posible que igual sea importante evaluar y tratar cuestiones de agua y saneamiento. Un objetivo importante de la evaluación y respuesta de WASH es también garantizar que las personas vivan con dignidad y seguridad. El diseño de una intervención de WASH debería contribuir con el logro de esta meta.

Influences on Health (adapted from UNICEF 2013) 

Las principales vías por las que los patógenos infectan a los seres humanos son las heces, los líquidos, los dedos, las moscas y los alimentos, y la evaluación debería identificar las vías específicas para el contexto. El objetivo principal de los programas de WASH en una respuesta humanitaria suele ser reducir el riesgo o incidencia de enfermedades diarreicas mediante la creación de barreras a lo largo de esas vías. 

F-Diagram (adapted from Wagner and Lanoix 1958) 

 

El “Diagrama F” (figura 8) es un modelo útil para entender las vías de transmisión de las enfermedades fecalorales T.53 y muestra formas en las que se puede interrumpir la transmisión. Es importante evaluar y entender estas vías de transmisión para identificar qué prácticas están causando un riesgo para la salud pública. También es importante evaluar y entender cómo los diferentes grupos en la comunidad entienden la transmisión y los factores conductuales que influyen en el riesgo y la percepción del riesgo (capítulo  B ). El proceso de motivar cambios en las conductas de higiene es complejo; puede haber factores sociales, culturales, espirituales, políticos y legales en juego. Por lo tanto, es necesario evaluar los factores que influyen en las conductas y prácticas de higiene (capítulo  B ). Los factores que influyen en las conductas suelen agruparse como “influencias o determinantes conductuales”.

Pueden facilitar el cambio o ser una barrera para el cambio. Los impulsores o barreras para el cambio incluyen creencias o sentimientos fuertes (a veces inconscientes) que pueden influir de manera positiva o negativa en el cambio. Por ejemplo, el enfoque de Saneamiento Total Liderado por la Comunidad (SANTOLIC, F.2) usa la repulsión T.45 como “impulsor” negativo del cambio y el orgullo como “impulsor” positivo. Diferentes modelos conductuales B.2 agrupan a estos impulsores y determinantes de diferentes maneras. Los diferentes determinantes del comportamiento deben evaluarse para identificar cuáles son los más importantes. Estos determinantes suelen variar en diferentes grupos de personas y pueden cambiar con el tiempo, generando la necesidad de una evaluación constante.

Las evaluaciones de WASH incluyen múltiples factores. El acceso a instalaciones de WASH apropiadas y las necesidades de higiene específicas de las personas varían según el grupo dentro de la comunidad. La respuesta también debe apoyar la dignidad, privacidad y sensación de bienestar de las personas, además de incluir intervenciones para reducir la mortalidad y morbilidad e influir en el comportamiento. Las mujeres podrían necesitar apoyo para manejar su menstruación de manera efectiva e higiénica P.7. La incontinencia puede ser un problema para algunos grupos, como hombres y mujeres de edad avanzada, y los medios efectivos para manejar las heces de los bebés y niños serán importantes para las personas que tengan hijos pequeños. Algunas personas podrían estar postradas en la cama, usar una silla de ruedas o tener una discapacidad visual: sus necesidades de higiene variarán. La seguridad, el acceso y la privacidad de las instalaciones de WASH son importantes si se quiere que todas las secciones de la comunidad las acepten y usen ampliamente, y también será necesario evaluar estas cuestiones.

Proceso y buenas prácticas

  • Colaborar con todos los demás sectores al evaluar, analizar y responder a riesgos para la salud pública P.9. Ser consciente de los resultados de otras evaluaciones sectoriales para informar intervenciones con prioridad.

  • Destacar las prácticas de higiene personal, doméstica y comunal con prioridad durante la evaluación. Suelen ser el lavado de manos con agua y jabón (o cuando no está disponible, cenizas), después del contacto con heces y antes de comer, la eliminación segura de las heces de los adultos y niños y el consumo de agua potable limpia. En algunos contextos, puede ser importante centrarse más en cuestiones específicas como higiene de los alimentos o manejo de los residuos.

  • Evaluar las conductas de higiene y riesgos para la salud pública en diversos entornos como escuelas, clínicas, centros de alimentación, cocinas comunitarias, espacios seguros para niños y otros lugares públicos E.6 y E.8, no solo en hogares y comunidades.

  • Entender la situación de higiene previa de las personas y cómo se han adaptado a la situación actual.

  • Identificar los diversos determinantes del comportamiento que pueden influir en los comportamientos de higiene durante la evaluación para entender cómo influir mejor en ellas. Esto puede ser difícil en una emergencia de inicio rápido pero debería ser posible realizar evaluaciones formativas (en profundidad) en los primeros meses. Los estudios en profundidad pueden ser útiles en diferentes etapas de la respuesta, en especial si los enfoques de HP actuales no parecen eficaces.

  • Desarrollar y probar previamente estrategias, métodos y herramientas de comunicación; un entendimiento de los determinantes del comportamiento no generará automáticamente comunicaciones efectivas (capítulo  C ).

  • Manejar la cantidad de datos recopilados. Hay numerosos factores que influyen en los comportamientos, y los datos pueden volverse rápidamente demasiado difíciles de analizar. El diseño de la evaluación A.3 debería basarse en lo que ya se conoce sobre los diferentes grupos de la población y el contexto y debería buscar entender dónde las intervenciones pueden tener el mayor impacto.

  • Variar el diseño del programa según el contexto específico, usando los datos específicos del contexto recopilados durante la evaluación. Por ejemplo, para cumplir el objetivo de garantizar agua potable limpia, un contexto puede requerir el uso de cubos con tapas y grifos, y otro podría necesitar reparaciones de los tanques de agua de los hogares.

  • Coordinar con otros sectores relevantes P.9. El sector de salud también podría llevar a cabo actividades (superpuestas) de promoción de la salud y comunicación de riesgos (incluidas evaluaciones) en la comunidad, lo que hace que la colaboración sea vital. Las intervenciones de WASH contribuyen con los efectos más amplios. Por ejemplo, además de prevenir enfermedades diarreicas, la comunicación sobre higiene (capítulo  C ) garantiza que las personas sepan cómo controlar las enfermedades en casa y cuándo deberían solicitar ayuda médica.

     

Propósito

Evaluar y profundizar un entendimiento de los factores que afectan las prácticas de higiene y la salud pública.

Important

  • La salud pública se ve afectada por muchos factores además del agua, saneamiento e higiene. Es importante entender cómo la comida y la nutrición, el acceso a la atención médica, el refugio, la protección y el medioambiente interactúan con WASH.

  • La coordinación y colaboración con otros P.9 es crucial para una evaluación efectiva de los factores que influyen en la salud y la higiene.

  • El uso de datos epidemiológicos oportunos es esencial para garantizar que la intervención de promoción de la higiene (HP) se diseñe y planifique según los riesgos actuales para la salud pública.

  • Diversos modelos de Cambio de comportamiento B.2 y WASH pueden facilitar un entendimiento más profundo de los diferentes factores que afectan a los comportamientos de higiene.

  • En muchas emergencias agudas, la evaluación inicial de WASH se centra en el uso de agua segura, el manejo de excrementos y el lavado de manos, ya que es probable que tengan el mayor impacto sobre la transmisión de enfermedades. Sin embargo, es necesaria una evaluación continua de los diferentes riesgos en cada contexto específico, ya que los riesgos evolucionarán con el tiempo.

References

Descripción general de diferentes sectores e intervenciones de emergencia

Sphere Association (2018): The Sphere Handbook: Humanitarian Charter and Minimum Standards in Humanitarian Response 4th Edition

Descripción de riesgos para la salud pública en emergencias y cómo responder eficazmente

Johns Hopkins University, IFRC (2008): The Johns Hopkins and Red Cross Red Crescent Public Health Guide in Emergencies 2nd Edition

Descripción general de la evaluación de la promoción de la higiene y enlace a la salud pública

UNHCR (2017): UNHCR Hygiene Promotion Guidelines

Información sobre determinantes conductuales clave de la salud y la higiene

Petit, V. (2019): The Behavioural Drivers Model. A Conceptual Framework for Social and Behaviour Change Programming

Información sobre los enlaces entre WASH y nutrición:

UNICEF (2016): Nutrition - WASH Toolkit

Guía sobre cómo realizar una evaluación de necesidades para el personal de campo

Currion, P. (2014): Humanitarian Needs Assessment. The Good Enough Guide, Practical Action Publishing. ACAPS, ECB

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